Viaje Geroasistencial a Suecia, febrero 2024
Ha sido mi primera visita a Suecia, y me ha encantado. La intención de este viaje era conocer los diferentes tipos de servicios hacia las personas mayores en Suecia, desde el Coliving para personas multiculturales sin hijos que viven con pareja o sin pareja, los servicios de atención continuada municipal, y la convivencia en pisos sociales del ayuntamiento de Estocolmo para el colectivo LGTBI. Suecia es conocida por su sistema de bienestar social, que incluye políticas y programas diseñados para garantizar la atención y el cuidado de las personas mayores.
En general, Suecia se esfuerza por garantizar que las personas mayores reciban el cuidado y la atención que necesitan para disfrutar de una buena calidad de vida, tanto en términos de salud física como emocional. Principalmente desde la propia administración, sin embargo, también hay colaboración del sector privado. Según Monica Wahlström, un tercio del presupuesto anual de los municipios va dirigido al sistema de bienestar. Me comentó que los municipios recaudan todos los impuestos de su territorio y una parte pequeña, se traspasa al Estado. Suecia es conocida por su amplio sistema de bienestar social y, en consecuencia, destina una parte significativa de su Producto Interno Bruto (PIB) para financiarlo. El porcentaje exacto del PIB que Suecia dedica al bienestar varía según los años y las políticas específicas en vigor. Sin embargo, en general, Suecia ha asignado históricamente alrededor del 25-30% de su PIB al gasto público en áreas como atención médica, educación, servicios sociales y otras formas de apoyo al bienestar de sus ciudadanos. Este alto nivel de inversión refleja el compromiso del país con la igualdad, la justicia social y el apoyo a sus ciudadanos en todas las etapas de la vida. Ver la Explicación de gastos individuales al recibir atención domiciliaria o residencia geriátrica facilitada por Monica Wahlström. Aquí encuentras el BC Espresso que hice con Monica sobr emirnado al exterior, ejemplo Suecia.
Mi primer vista me ha llevado a la casa colectiva Dunderbacken en Axelsberg, un #coliving en las afueras de #estocolmo con 61 apartamentos. El tamaño varía de 35 a 72 metros cuadrados y los alquileres oscilan entre los 660€ y 1044€ al mes. El propietario del complejo, es la empresa municipal de viviendas Familjebostäder de Estocolmo, con la que cada inquilino firma un contrato de alquiler. Tienen unos espacios comunes de 500m2, que incluyen salón, cocina, comedor, sala de estar, gimnasio, jardín, sauna, lavandería, espacio de bricolaje, biblioteca, manualidades etc. 
Ulrika, la presidenta de esta comunidad me comenta, que sólo personas afiliadas a la asociación Dunderbacken pueden vivir en este complejo. La cuota de socio anual cuesta 35€, y hay que pagar una entrada única, tipo inscripción, de 53€. Existe la opción de asociarse al colectivehus, que sirve para apuntarse a la lista de espera por si un día te apetece ir a vivir allí, o puedes alquilar un espacio común para celebrar una fiesta familiar.
Me llamaron la atención los criterios para ser seleccionado y aceptado: tener a partir de 40 años, con o sin pareja, pero sin hijos a cargo. Es decir, han tomado colectivamente la decisión de no vivir con niños, sin embargo, pueden venir los hijos o nietos a visitarlos y quedarse incluso unas noches, pero no de forma permanente. Durante la conversación, estaban presentes diferentes personas de la comunidad y me explicaron, que tienen muchas visitas e interés de personas de fuera, tanto a nivel nacional como internacional, incluso estuvieron también en España, para explicar su modelo de convivencia. Son una comunidad mixta, diversa e internacional (EEUU, Finlandia, Alemania). Ulrika es una gran defensora de ese tipo de vida, lo vive con pasión y dice: requiere disciplina y hay que tener claro dónde te metes, “esto no es para todo el mundo”. Por ejemplo, un compromiso durante la semana, de lunes a viernes es, preparar la cena y cenar juntos y participar activamente en unos de los 27 grupos de trabajo. Por el momento hay algunas personas en situación de dependencia y necesidad de cuidados, siguen viviendo en el Coliving, ya que aún es posible vivir solo en su propia casa con el apoyo del SAD municipal. Sin embargo, la comunidad ha acordado que, en 
caso de que un día alguien tenga una gran necesidad de cuidados y ya no pueda vivir solo o el apoyo comunitario con un SAD ya no sea suficiente, habrá que plantearse el traslado a una Residencias de cuidados a largo duración. Ulrika dice: «Proporcionamos todo el apoyo que podemos, pero hemos decidido que no somos ni queremos ser cuidadores permanentes». Aunque estas personas ya no pueden participar tan activamente como antes, dice Ulrika “mejor aquí que en una residencia”, en ello también estaban todos de acuerdo. Si hay un piso vacío se alquila rápidamente, incluso vienen personas desde muy lejos. Fue el caso de un señor, que vivía mucho tiempo en el ámbito rural en el norte de Suecia, y está muy contento de estar allí. Ha encontrado personas con quien compartir. Me pregunta: ¿No tiene algo así en Barcelona? “Me gustaría intercambiar y vivir unos meses en Barcelona” La expresión de su necesidad de salir, no era solo por el sol, nos hemos entendido perfectamente. Eso me ha hecho pensar y reflexionar sobre el intercambio tipo Senior Erasmus.
Ha sido un placer conversar con el grupo, visitar in situ las instalaciones, y el propio piso de Ulrika, gracias.
La segunda vista me llevaba a un “colivinglgtbi” de viviendas sociales, también en Estocolmo. He oído hablar mucho de ellos, conjuntamente con el Lebensvielfalt de 
Berlín eran pioneros. La asociación de viviendas Regnbågen se fundó en 2009. El alojamiento se puso en marcha en 2013 en colaboración con el Ayuntamiento de Estocolmo. La asociación alquila 28 pisos a la inmobiliaria municipal Micasa Fastigheter, que a su vez alquila los pisos a sus miembros. Seniorboendet ocupa las últimas tres plantas de ocho, con unas vistas inscreibles y cada uno con balcón. La mayoría de los pisos son tipo apartamiento de una habitación con cocina, pero existe la opción de alquiler de un piso de una o dos habitaciones. El tamaño varía de 44 a 70 metros cuadrados y los alquileres oscilan entre las 643 y las 893 € al mes (2023). Seniorboendet se encuentra en uno de los tres complejos vivenciales, que han sido reformados completamente y adaptados a las necesidades de las personas. Mientras Regnbågen ocupa tres plantas, el resto está alquilado a la población mayor en general de Estocolmo. Todos tienen que cumplir unos requisitos para poder vivir allí, es decir, solo aquellas personas con un cierto nivel de ingresos mensuales tienen derecho a vivir allí. Los #apartamentosconservicios tienen un #SAD municipal en la planta baja un #restaurante una #cafetería #peluquería #serviciosmedicos #gimnasio y #espaciosludicos.
El objetivo de la cooperativa Regnbågens es proporcionar seguridad, comunidad y bienestar en la vejez, a personas que a menudo han sufrido marginación y exclusión en la sociedad. Me recibieron tres personas de la cooperativa Regnbägen en la cafetería común, dónde sirven cada día para el vecindario café, té, infusión, tartas, bocadillos etc. además ¡GRATIS¡ Con café y tarta, hablábamos de nuestras cosas, y la verdad, fue un placer. Me preguntan muy interesadas sobre mis experiencias score el colectivo LGTBI Senior y como viven en otros países. Hablamos sobre Berlín, Chicago, Viena, Ámsterdam y Londres, y coincidimos, es bueno tener estos servicios específicos. Hablando sobre el porqué, y cómo es vivir en espacios 
específicos solo para el colectivo LGTBI Senior, y sería necesario tenerlo, la respuesta fue clara: Si. Tener un #espacioseguro, no tener que explicar nada, y no sentirse solo, entre otras, era su razón mudarse a estas viviendas. Opinan que hay que difundir este tipo de #convivencia, sin embargo, estuvimos de acuerdo que, lo ideal, sería disponer de distintas opciones con el fin de encontrar y seleccionar la forma de #vivir y #envejecer, pues no todo vale para todas y todos. ¡No se trata de hacer Guetos”, sino, respetar la dignidad! Preguntándonos si ¿Existe una forma ideal o mejor vivir o convivir entre el colectivo o los demás? ¡No! Pero “¡No es que no me guste vivir con otras personas mayores, pero no quiero volver al armario! Expresión real, captada durante las conversaciones con un grupo focal que hice, algo parecido salió en la conversación con ellos. “Es el miedo de muchos mayores del colectivo LGTBI, no poder ser cómo y quién eres, esconder tus deseos y ser rechazado. Por ello, países cómo Suecia, Holanda, Alemania, Austria, España, EEUU o Inglaterra entre otros, ofrecen ya servicios dirigidos a ellos, a través de asociaciones, fundaciones o empresas privadas como: apartamentos con servicios, residencias asistidas, housing, sellos gay friendly, centros de apoyo etc., con el fin de vivir cómo quieres, sin dar explicaciones porque. Estoy convencido que hay demanda y necesidad para hacer algo parecido en otros países. A mi gustaría lanzar un proyecto así. Agradezco mucho a Zusanne, Pia y Anders, por enseñarme sus #viviendas y contarme su #filosofía de vida en este #espaciosegurolgtbi y muy agradable. Desde luego, me ha encantado y me iría a #vivir allí. Estoy muy agradecido por esa oportunidad y poder haber entrado en su espacio, facilitarme información sobre el cómo y de qué manera viven juntos en la diversidad.
Después de hablar con estos dos grupos diferentes, este tipo de vivir conjuntamente el “Co” es desde luego un antídoto para la soledad no deseada, y aprovechar y disfrutar la vida con personas con afinidades comunes. Ambas tienen algo en común, convivir, pero cada uno a su manera. A algunos les gustará, a otros no, porque no es su forma de vida, pero existe la opción de elegir entre una variedad de servicios, y eso es para mí muy importante.
La 2ª parte de mi viaje geroasistencial se publicara la semana que viene.
Gracias por tu interés. Stephan Biel
Comentarios recientes: